Dos mariñanos fueron condenados como consecuencia de un accidente laboral ocurrido en una obra de San Miguel de Reinante, en Barreiros. Contra un tercero, que estaba imputado inicialmente, fue retirada la acusación. Los condenados son D.V.P y M.A.P.S. Ambos aceptaron tres meses de prisión a sustituir por el pago de una multa de seis meses a razón de seis euros diarios.
El fiscal explicó que el accidente ocurrió el 9 de junio de 2006 en una obra que realizaba la empresa Chao e Hijos Vivero. Un trabajador que estaba realizando labores de desencofrado en el extremo de la placa, se precipitó al vacío desde una altura de 3,50 metros. Como consecuencia del incidente se produjo una fractura de acuñamiento a nivel de una vértebra.
El fiscal imputó al responsable de la empresa, el coordinador de seguridad y al encargado de la obra porque consideró que permitieron la realización y ejecución por parte del trabajador de funciones de desencofrado a una altura superior a los tres metros sin protección alguna, ni colectiva ni individual. La inspección llevada a cabo en el lugar, una vez ocurrido el accidente reveló que no había ni barandillas ni redes, ni otros elementos que garantizasen la integridad de los operarios.
No tenían cinturón
A nivel individual los trabajadores supuestamente carecían de arnés y cinturón de seguridad. El fiscal entiende que con tal proceder los condenados no solo violaron la normativa de seguridad laboral al efecto, sino que pusieron en grave riesgo la integridad física tanto del trabajador afectado como de otros compañeros que trabajaban aquel día.
Los hechos fueron calificados como un delito contra los derechos de los trabajadores y otro de lesiones. La acusación pública pidió inicialmente para cada uno de los acusados dos años de prisión y diez meses de multa a razón de diez euros diarios. Antes de iniciarse la vista, en la mañana de ayer, los abogados de los acusados negociaron la reducción en la petición de penas con el fiscal que se ocupó del caso.
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